viernes, 31 de mayo de 2019

jueves, 30 de mayo de 2019

EN ESE INSTANTE

Inspirador de Amaneceres 
de Gladys Acevedo 
es un conjunto de poemas expresando diferentes estados del alma a partir del amor que se desvanece y resurge en cada amanecer. Es una aceptación de la realidad entretejida con palabras en medio del silencio, los deseos y la soledad.
Ha sido organizado en cuatro tiempos: Nacimiento, Cúspide, Crepúsculo y Renacer.
Fue prologado por el poeta Miguel Bologna.

NACIMIENTO

EN ESE INSTANTE

Estalla el universo
cuando tu nombre
pinta de naranjas
el atardecer.

Es un instante...
y las letras se diluyen
en saetas atravesando
espesos nubarrones.

Mi mirada se hace una
con el vuelo del águila.
Danza misteriosa 
sobre el perfil de las montañas.

Y justo, en ese instante ...
tu nombre se prende de mis labios.
La tarde me regala este
instante de profunda paz.

Gladys Acevedo
D/R

Fotografía de Gabriel Altamirano





miércoles, 22 de mayo de 2019

Susurrando.



Paisaje: Pampa de Pocho, Departamento Pocho, Córdoba, Argentina. Gladys Acevedo

lunes, 13 de mayo de 2019

AMANECER OTOÑAL.


SIEMPRE HAY UN INSTANTE ... UN INSTANTE HECHO PALABRA.


Mi Sentir

Poemas en homenaje a la tierra que me adoptó:Pocho, departamento del oeste cordobés en Argentina.

¡Pampa de Pocho!
Te despliegas perezosa
entre palmares y algarrobales;
entre aromas, silencios
y lastimeros churcales.

Tu silueta lujuriosa funde
el ritmo cadenciosos de tus ríos,
el rojo estridente de mil atardeceres
junto a la transparencia de tu cielo
fileteado de volcanes.-

¡Pampa de Pocho!
Bendita tierra tapizada de verdores,
embriagada por tus encantos
esperas pacientemente
el fruto de tus maizales


(Antología S.A.D.E 99 Poesía)


REMINISCENCIAS

REMINISCENCIAS

Puchú, Puchú.
tu nombre de valiente
ha quedado hundido
en el corazón de la pampa pochana;
esa tierra bendita
que atesora mil batallas.
Tus huellas duermen
bajo los caminos polvorientos;
mientras brota quejumbrosa la sal
desde la profundidad de tus dominios.

Tu raza quedó escondida
bajo la alfombra de maizales
vertiendo la fuerza de un pueblo
ya desaparecido.
La misma luna,
el mismo sol,
las mismas sierras
que tus ojos absorbieron
para prenderse de tu corazón.

Puchú, Puchú,
el latido de tu pecho bravío
estalla cada atardecer
en su matiz enrojecido.
Mientras, el canto de tu tierra
duerme entre miles de palmares
sacudiendo sus crestas
sobre misteriosos pedregales.
(Traslasierra. Voces del 2.000. Antología)


CANTO A TANINGA

CANTO A TANINGA

Taninga,
quiero pintarte
con brillos de estrellas,
con hebras de lunas.

Taninga,
deseo cantarte
con murmullo de agua
brincando de piedra en piedra.

Taninga,
quiero salpicar tus lomadas
con brisas de noches veraniegas.

Aquietarte con el frío de los inviernos
abrazada por el gélido viento sureño.

Taninga,
quiero alumbrar
la alfombra aterciopelada
de tus pastizales.
Quiero aunar el canto de los grillos,
de las chicharras
y el andar silencioso
de graciosas vizcachas.

Quiero pintarte con mis sueños
desatando mi canto
mientras cabalgo entre tus
cerros y lomadas.
(Traslasierra. Voces del 2000.
Antología)



DESCUBRIR

DESCUBRIR
Velia Villarreal

En esas noches pochanas,
acunada con el suave cantar de las chicharras,
descubrí la inmensidad
entre destellos de noches estrelladas.

Y aquí me encontré,
entre sierras y palmares,
bajo una luna dibujada.


Y aquí me quedé,
para el ver el verdor de los maizales,
para sentir la fragancia diáfana
de hierbas y algarrobales.

Pocho, Pocho !
Eres la tierra donde ha quedado mi simiente.
Un hijo que absorbe tu esencia tradicional,
las siluetas de tus cerros,
el color de tus amaneceres,
la transparencia de tus ríos
recorriendo caminos de piedra y sal.

(Traslasierra. Las voces del 2000 . Antología)